Una Anécdota

Yo pensaba que por ejemplo para que hacer el “Facebook”, ya que no tenia utilidad, pero esto lo pensaba antes, ya que lo que me paso hace unos días fue muy bueno, en mi msn tengo muchos amigos que iban conmigo a la secundaria u otros amigos, pero hay muchos que no veo desde hace años que salimos de la secundaria o bachillerato en el año 2000.

Hace unos días vi que una de mis cuñadas se creó un Facebook, y vi que podía contactarse con muchos amigos y que era muy fácil de buscar, y dije en mi mente ¿podre ver a mis amigos que no tengo en el msn? Y la respuesta fue que sí.

A los días me cree una cuenta de este y empecé a buscar amigos que tenia de argentina y que hacía mucho que no veía y realmente encontré muchísimo, y la mayoría me ha aceptado en este medio y estas en contacto más seguido, ya que puedes chatear como el msn, y esto hace mas practico para hablar y no solo la cementación en los muros y si no también ver a tus primos y ver que ya están casados y algunos tienen hijos.

Como veo este es un medio de comunicación masivo, ya que pueden estar varias personas comunicándose entre sí, y no hace falta estar cerca o lejos, es muy similar al msn, nada más, que este medio, es más utilizado y más fácil y práctico para buscar amigos y compañeros de otros lugares ya que solo necesitas en nombre o el apellido de tus amigos o familiares, y con esto solamente podemos platicar con las demás personas, eso sí solamente cuando te aceptan. Es muy raro encontrar personas que no te acepten si eres un conocido o un amigo de ellos. Sin contar que hay personas que no lo hacen.

En conclusión, hay veces que uno dice para que usamos esto, para que tener aquello, pero la mayoría de las veces tratamos de imitar a los demás, y hay muchas veces que gracias a esto nos damos cuenta que estamos en un error y que hay que meditar y recapacitar en lo que pensamos, pero en otra parte al hacerlo caemos en un problemas más grande y por eso no siempre hay que hacerlo, el imitar a los demás. En pocas palabras hay muchas veces que no hay que decir no lo voy a hacer, o para que, si la mayoría de las veces lo hacemos y nos damos cuenta de que estábamos equivocados o en muy pocos casos de que estábamos en lo correcto.